¿REALMENTE EXISTIERON LOS GIGANTES?
¿FUERON LOS GIGANTES LOS HIJOS DE ÁNGELES CAÍDOS CON MUJERES?
¿MIENTE LA ESCRITURA O SE TRATA DE UNA MALA INTERPRETACIÓN DE LA BIBLIA?
Por Jesús Mondragón (Saulo de Tarso)
Actualmente muchas personas, tanto cristianos católicos, como cristianos protestantes y de grupos sectarios, tienen la creencia de que en verdad existieron gigantes en la antigüedad, que fueron hijos de mujeres y los ángeles caídos. Los más escépticos y ateos, aseguran que es otro cuento inventado por la Biblia. ¿Qué hay de verdad y mentira en el texto de Génesis 6, 1-4? O la Biblia miente, o bien, han sido las personas quienes han comprendido mal las Escrituras. Procedamos a encontrar la verdad…
Todo nace a partir de un texto bíblico de difícil interpretación en el libro del Génesis.
Génesis 6,1-4
Cuando la humanidad comenzó a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas, vieron los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran atractivas, y tomaron por mujeres a las que prefirieron de entre todas ellas. Entonces dijo Yahvé: “No permanecerá para siempre mi espíritu en el hombre, porque no es más que carne; que sus días sean ciento veinte años.” Los nefilim aparecieron en la tierra por aquel entonces (y también después), cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas de los hombres y éstas les dieron hijos: éstos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos.
Además del relato que da la Biblia en Génesis, ésta palabra hebrea (Nefilim) sólo se menciona otras dos veces, específicamente en Números 13,33.
La interpretación de que los hijos de Dios eran ángeles caídos que fueron y tomaron a las mujeres, hijas de los hombres como esposas y éstas les dieron por hijos a los gigantes nefilim como hijos, es tan antigua como la Biblia misma, aunque no era la única interpretación, ha sido hasta nuestros días sin embargo, la más difundida. ¿Cuál es esa otra interpretación acerca de los gigantes?
Comencemos diciendo que en la exégesis bíblica, la regla número 1 para encontrar la correcta explicación es buscar dentro de la Biblia misma y no el buscar explicaciones fuera de la Escritura, ya que éstas nos conducirán a errores abismales y terminaremos enseñando enormes tonterías, quizás muy llamativas, pero total y completamente falsas. La Escritura es una unidad y debemos ver todo lo que la Biblia dice al respecto de un mismo tema.
Un ejemplo de lo que venimos diciendo es el tan cacaraqueado tema de la “Gran Ramera” de los protestantes. Si el católico asegura que la Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo, el protestante replica que en ninguna parte de la Biblia dice “iglesia Católica”, pero al interpretar el Apocalipsis, el protestante asegura que la Gran Ramera es la Iglesia Católica, aunque en ninguna parte de apocalipsis sea mencionada la “Iglesia Católica”. Esto porque los hermanos separados han buscado la explicación de un texto que no entienden, fuera de la Biblia. Si buscaran dentro de la Biblia misma, aprenderían que la Escritura muestra que la Gran Ramera es Jerusalén.
¿QUIÉNES SON LOS HIJOS DE DIOS DE GÉNESIS 6?
Sobre Génesis 6, 1-4, debemos revisar primeramente su contexto, es decir, lo que la Biblia dice antes y después. Al morir asesinado Abel, su hermano Caín fue desterrado por Dios y entonces…
Génesis 4, 25
Adán volvió a tener relaciones con su mujer, que dio a luz un hijo, al que puso por nombre Set…
Aunque en el libro de Job 1, 6 y 2, 1; los ángeles son llamados hijos de Dios, hoy sabemos que lo son en cuanto a que son criaturas creadas por Dios, pero los ángeles no son verdaderos hijos de Dios, como lo somos los hombres por adopción filial y gracia de Dios.
Hebreos 1,5
En efecto, ¿a qué ángel dijo alguna vez (Dios) “Hijo mío eres tú; yo te he engendrado hoy”, o también “Yo seré para él un padre, y él será para mí un hijo”?
¿Quiénes son entonces los hijos de Dios? Vayamos a la Biblia.
Deuteronomio 32:8
Cuando el Altísimo repartió las naciones, cuando distribuyó a los hijos de Adán, fijó las fronteras de los pueblos, según el número de los hijos de Dios.
He ahí la respuesta, los hijos de Dios no son ángeles, son los hombres, los hijos de Adán. Set, el tercer hijo de Adán fue como Abel y amaba a Dios. Caín maldecido por Dios y desterrado se casó también y tuvo descendencia, ¿con quién se casó Caín si la tierra aún no estaba habitada? La Biblia nuevamente nos tiene la respuesta:
Génesis 5, 4-5
Después de engendrar a Set, Adán vivió ochocientos años, y engendró hijos e hijas. Cuando Adán murió tenía novecientos treinta años.
Antes del diluvio los seres humanos vivían cientos de años. Adán después de engendrar a Set, tuvo más hijos e hijas ¡por 800 años! Y con una de ellas se casó Caín. Los ángeles son espíritus, no tienen cuerpo, no pueden por tanto tener relaciones con las mujeres y engendrar hijos. Claramente nos enseñó Jesucristo que los ángeles no se casan ni tienen descendencia:
Mateo 22:29-30
Jesús les respondió: Estáis en un error, por no entender las Escrituras ni el poder de Dios. Pues en la resurrección, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido, sino que serán como ángeles en el cielo.
Jesucristo también era un espíritu antes de venir al mundo y tuvo que adquirir un cuerpo para eso. Aunque es Dios, Jesús no materializó un cuerpo de la nada, sino que tuvo que nacer de una mujer para ello, la historia ya todos la conocemos. Dios ya terminó la creación y no iba a crear un cuerpo sólo para venir al mundo. En ninguna parte de la Biblia dice tampoco que Dios dotó de cuerpo a los ángeles, materializar un cuerpo de la nada es un acto de creación que sólo Dios puede realizar, no los ángeles. Pero de Jesucristo para venir al mundo, la Biblia nos dice:
Hebreos 10:5
Por eso, al entrar en este mundo, dice: Sacrificio y oblación no quisiste; pero me has formado un cuerpo.
Lo que Génesis nos quiere decir en el capítulo 6 versículo 2 es que: Vieron los hijos de Set, (los hijos de Dios) que las hijas de Caín (las hijas de los hombres) eran atractivas y las tomaron por mujeres. Lo cuál no agradó para nada a Dios, que sus servidores se mezclaran y emparentaran con la raza maldita de Caín; por eso en el versículo 3 nos dice que Yahvé, reduce la vida del hombre que antes vivía cientos de años a sólo 120 años. Dios había separado a Caín y su raza para que el mal no se esparciera más por la tierra, es decir, separó el mal del bien. Pero ahora, con los hijos de Set uniéndose a las hijas de Caín, el mal cubrirá toda la tierra. El mal será tanto, que Dios decidiría destruir la humanidad por medio del diluvio universal.
¿QUIÉNES SON LOS NEFILIM Y QUIÉNES SON LOS GIGANTES?
El siguiente versículo, el 4 de Génesis 6 dice: Los nefilim aparecieron en la tierra por aquel entonces (y también después), cuando los hijos de Set (los hijos de Dios) se unieron a las hijas de Caín (las hijas de los hombres) y éstas les dieron hijos: éstos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos.
La Biblia menciona que los nefilim aparecieron por aquella época y continuaron existiendo también después, es decir, después del diluvio que es narrado a partir del siguiente versículo de Génesis 6, el versículo 5; la historia es ampliamente conocida. Aquí nos ocuparemos ahora de los “Nefilim”, que significa “los caídos”, de ahí que por razón de su significado etimológico de, los caídos, se piense a menudo que se trata de ángeles caídos; pero una vez vista la imposibilidad de eso… Nuevamente vayamos a la Biblia en busca de respuestas. Como podemos ver, en Génesis 6, 1-4 se habla de los caídos Nefilim, los héroes de la antigüedad, ¡nunca se habla ahí de gigantes! Se está mezclando una cosa con otra. ¿Quiénes fueron los caídos Nefilim? Es el profeta Ezequiel en capítulo 32, 17-32, quien nos da la respuesta:
Ezequiel 32:17-32
El año duodécimo, el quince del primer mes, la palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos: Hijo de hombre, haz una lamentación sobre la multitud de Egipto, hazle bajar, a él y a las hijas de las naciones, majestuosas, a los infiernos, con los que bajan a la fosa. ¿A quién superas en belleza? Baja, acuéstate con los incircuncisos. En medio de las víctimas de la espada caen (la espada ha sido entregada, la han sacado) él y todas sus multitudes. Le hablan de en medio del seol los más esclarecidos héroes, con sus auxiliares: «Han bajado, yacen ya los incircuncisos, víctimas de la espada». Allí está Asur y toda su asamblea con sus sepulcros en torno a él, todos caídos, víctimas de la espada; sus sepulcros han sido puestos en las profundidades de la fosa, y su asamblea está en torno a su sepulcro, todos caídos víctimas de la espada, los que sembraban el pánico en la tierra de los vivos. Allí está Elam con toda su multitud en torno a su sepulcro; todos caídos víctimas de la espada, han bajado, incircuncisos, a los infiernos, ellos que sembraban el pánico en la tierra de los vivos. Soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. En medio de estas víctimas se le ha preparado un lecho, entre toda su multitud con sus sepulcros en torno a él; todos ellos incircuncisos, víctimas de la espada, por haber sembrado el pánico en la tierra de los vivos; soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. Se les ha puesto en medio de estas víctimas. Allí están Mesek, Túbal y toda su multitud con sus sepulcros en torno a él, todos incircuncisos, atravesados por la espada, por haber sembrado el pánico en la tierra de los vivos. No yacen con los héroes caídos de antaño, aquellos que bajaron al seol con sus armas de guerra, a los que se les ha puesto la espada bajo su cabeza y los escudos sobre sus huesos, porque el pánico de los héroes cundía en la tierra de los vivos. Pero tú serás quebrantado en medio de incircuncisos y yacerás con las víctimas de la espada. Allí está Edom, sus reyes y todos sus príncipes, que fueron puestos, a pesar de su prepotencia, entre las víctimas de la espada. Yacen entre incircuncisos, con los que bajan a la fosa. Allí están todos los príncipes del norte, todos los sidonios, que bajaron con las víctimas, a pesar del pánico que sembraba su prepotencia. Confundidos, yacen, incircuncisos, entre las víctimas de la espada, y soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. Faraón los verá y se consolará a la vista de toda esa multitud, víctima de la espada, Faraón y todo su ejército, oráculo del Señor Yahveh. Porque había sembrado el pánico en la tierra de los vivos, será tendido en medio de incircuncisos, con las víctimas de la espada: Faraón y toda su multitud, oráculo del Señor Yahveh.
Puede apreciarse en el texto anterior que estos hombres son descritos constantemente como "los caídos", "los héroes", "los héroes de antaño", caídos por la espada, exactamente con la misma palabra de Génesis, (Nefilim), misma que no es usada en ninguna parte de la Biblia, sino sólo en estos dos textos (Génesis 6,4 y Números 13,33).
PERO, ¿Y ENTONCES LOS GIGANTES?
La Biblia no miente, los gigantes existieron y continúan existiendo hasta el día de hoy. Los hombres pueden mentir, pero la Biblia no, y aunque abundan fotomontajes en internet con falsos esqueletos inmensos e irreales al puro estilo hollywoodense, los gigantes de que habla la Biblia sí son reales, tan reales como los que se pueden ver hoy, famosos muchos de ellos.
¿MIENTE LA ESCRITURA O SE TRATA DE UNA MALA INTERPRETACIÓN DE LA BIBLIA?
Por Jesús Mondragón (Saulo de Tarso)
Los Nefilim o Nephilim hebreo: הַנְּפִלִ֞ים, eran –según el relato bíblico de Génesis 6:1-4– una legendaria raza de gigantes híbridos surgidos como resultado de la unión antinatural entre ángeles malvados, es decir, demonios y mujeres humanas, los cuales habrían existido en la época de los patriarcas Enoc y Noé y se habrían extinguido posteriormente durante el diluvio universal.
Todo nace a partir de un texto bíblico de difícil interpretación en el libro del Génesis.
Génesis 6,1-4
Cuando la humanidad comenzó a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas, vieron los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran atractivas, y tomaron por mujeres a las que prefirieron de entre todas ellas. Entonces dijo Yahvé: “No permanecerá para siempre mi espíritu en el hombre, porque no es más que carne; que sus días sean ciento veinte años.” Los nefilim aparecieron en la tierra por aquel entonces (y también después), cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas de los hombres y éstas les dieron hijos: éstos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos.
Además del relato que da la Biblia en Génesis, ésta palabra hebrea (Nefilim) sólo se menciona otras dos veces, específicamente en Números 13,33.
La interpretación de que los hijos de Dios eran ángeles caídos que fueron y tomaron a las mujeres, hijas de los hombres como esposas y éstas les dieron por hijos a los gigantes nefilim como hijos, es tan antigua como la Biblia misma, aunque no era la única interpretación, ha sido hasta nuestros días sin embargo, la más difundida. ¿Cuál es esa otra interpretación acerca de los gigantes?
Comencemos diciendo que en la exégesis bíblica, la regla número 1 para encontrar la correcta explicación es buscar dentro de la Biblia misma y no el buscar explicaciones fuera de la Escritura, ya que éstas nos conducirán a errores abismales y terminaremos enseñando enormes tonterías, quizás muy llamativas, pero total y completamente falsas. La Escritura es una unidad y debemos ver todo lo que la Biblia dice al respecto de un mismo tema.
Un ejemplo de lo que venimos diciendo es el tan cacaraqueado tema de la “Gran Ramera” de los protestantes. Si el católico asegura que la Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo, el protestante replica que en ninguna parte de la Biblia dice “iglesia Católica”, pero al interpretar el Apocalipsis, el protestante asegura que la Gran Ramera es la Iglesia Católica, aunque en ninguna parte de apocalipsis sea mencionada la “Iglesia Católica”. Esto porque los hermanos separados han buscado la explicación de un texto que no entienden, fuera de la Biblia. Si buscaran dentro de la Biblia misma, aprenderían que la Escritura muestra que la Gran Ramera es Jerusalén.
¿QUIÉNES SON LOS HIJOS DE DIOS DE GÉNESIS 6?
Sobre Génesis 6, 1-4, debemos revisar primeramente su contexto, es decir, lo que la Biblia dice antes y después. Al morir asesinado Abel, su hermano Caín fue desterrado por Dios y entonces…
Génesis 4, 25
Adán volvió a tener relaciones con su mujer, que dio a luz un hijo, al que puso por nombre Set…
Aunque en el libro de Job 1, 6 y 2, 1; los ángeles son llamados hijos de Dios, hoy sabemos que lo son en cuanto a que son criaturas creadas por Dios, pero los ángeles no son verdaderos hijos de Dios, como lo somos los hombres por adopción filial y gracia de Dios.
Hebreos 1,5
En efecto, ¿a qué ángel dijo alguna vez (Dios) “Hijo mío eres tú; yo te he engendrado hoy”, o también “Yo seré para él un padre, y él será para mí un hijo”?
¿Quiénes son entonces los hijos de Dios? Vayamos a la Biblia.
Deuteronomio 32:8
Cuando el Altísimo repartió las naciones, cuando distribuyó a los hijos de Adán, fijó las fronteras de los pueblos, según el número de los hijos de Dios.
He ahí la respuesta, los hijos de Dios no son ángeles, son los hombres, los hijos de Adán. Set, el tercer hijo de Adán fue como Abel y amaba a Dios. Caín maldecido por Dios y desterrado se casó también y tuvo descendencia, ¿con quién se casó Caín si la tierra aún no estaba habitada? La Biblia nuevamente nos tiene la respuesta:
Génesis 5, 4-5
Después de engendrar a Set, Adán vivió ochocientos años, y engendró hijos e hijas. Cuando Adán murió tenía novecientos treinta años.
Antes del diluvio los seres humanos vivían cientos de años. Adán después de engendrar a Set, tuvo más hijos e hijas ¡por 800 años! Y con una de ellas se casó Caín. Los ángeles son espíritus, no tienen cuerpo, no pueden por tanto tener relaciones con las mujeres y engendrar hijos. Claramente nos enseñó Jesucristo que los ángeles no se casan ni tienen descendencia:
Mateo 22:29-30
Jesús les respondió: Estáis en un error, por no entender las Escrituras ni el poder de Dios. Pues en la resurrección, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido, sino que serán como ángeles en el cielo.
Jesucristo también era un espíritu antes de venir al mundo y tuvo que adquirir un cuerpo para eso. Aunque es Dios, Jesús no materializó un cuerpo de la nada, sino que tuvo que nacer de una mujer para ello, la historia ya todos la conocemos. Dios ya terminó la creación y no iba a crear un cuerpo sólo para venir al mundo. En ninguna parte de la Biblia dice tampoco que Dios dotó de cuerpo a los ángeles, materializar un cuerpo de la nada es un acto de creación que sólo Dios puede realizar, no los ángeles. Pero de Jesucristo para venir al mundo, la Biblia nos dice:
Hebreos 10:5
Por eso, al entrar en este mundo, dice: Sacrificio y oblación no quisiste; pero me has formado un cuerpo.
Lo que Génesis nos quiere decir en el capítulo 6 versículo 2 es que: Vieron los hijos de Set, (los hijos de Dios) que las hijas de Caín (las hijas de los hombres) eran atractivas y las tomaron por mujeres. Lo cuál no agradó para nada a Dios, que sus servidores se mezclaran y emparentaran con la raza maldita de Caín; por eso en el versículo 3 nos dice que Yahvé, reduce la vida del hombre que antes vivía cientos de años a sólo 120 años. Dios había separado a Caín y su raza para que el mal no se esparciera más por la tierra, es decir, separó el mal del bien. Pero ahora, con los hijos de Set uniéndose a las hijas de Caín, el mal cubrirá toda la tierra. El mal será tanto, que Dios decidiría destruir la humanidad por medio del diluvio universal.
¿QUIÉNES SON LOS NEFILIM Y QUIÉNES SON LOS GIGANTES?
El siguiente versículo, el 4 de Génesis 6 dice: Los nefilim aparecieron en la tierra por aquel entonces (y también después), cuando los hijos de Set (los hijos de Dios) se unieron a las hijas de Caín (las hijas de los hombres) y éstas les dieron hijos: éstos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos.
La Biblia menciona que los nefilim aparecieron por aquella época y continuaron existiendo también después, es decir, después del diluvio que es narrado a partir del siguiente versículo de Génesis 6, el versículo 5; la historia es ampliamente conocida. Aquí nos ocuparemos ahora de los “Nefilim”, que significa “los caídos”, de ahí que por razón de su significado etimológico de, los caídos, se piense a menudo que se trata de ángeles caídos; pero una vez vista la imposibilidad de eso… Nuevamente vayamos a la Biblia en busca de respuestas. Como podemos ver, en Génesis 6, 1-4 se habla de los caídos Nefilim, los héroes de la antigüedad, ¡nunca se habla ahí de gigantes! Se está mezclando una cosa con otra. ¿Quiénes fueron los caídos Nefilim? Es el profeta Ezequiel en capítulo 32, 17-32, quien nos da la respuesta:
Ezequiel 32:17-32
El año duodécimo, el quince del primer mes, la palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos: Hijo de hombre, haz una lamentación sobre la multitud de Egipto, hazle bajar, a él y a las hijas de las naciones, majestuosas, a los infiernos, con los que bajan a la fosa. ¿A quién superas en belleza? Baja, acuéstate con los incircuncisos. En medio de las víctimas de la espada caen (la espada ha sido entregada, la han sacado) él y todas sus multitudes. Le hablan de en medio del seol los más esclarecidos héroes, con sus auxiliares: «Han bajado, yacen ya los incircuncisos, víctimas de la espada». Allí está Asur y toda su asamblea con sus sepulcros en torno a él, todos caídos, víctimas de la espada; sus sepulcros han sido puestos en las profundidades de la fosa, y su asamblea está en torno a su sepulcro, todos caídos víctimas de la espada, los que sembraban el pánico en la tierra de los vivos. Allí está Elam con toda su multitud en torno a su sepulcro; todos caídos víctimas de la espada, han bajado, incircuncisos, a los infiernos, ellos que sembraban el pánico en la tierra de los vivos. Soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. En medio de estas víctimas se le ha preparado un lecho, entre toda su multitud con sus sepulcros en torno a él; todos ellos incircuncisos, víctimas de la espada, por haber sembrado el pánico en la tierra de los vivos; soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. Se les ha puesto en medio de estas víctimas. Allí están Mesek, Túbal y toda su multitud con sus sepulcros en torno a él, todos incircuncisos, atravesados por la espada, por haber sembrado el pánico en la tierra de los vivos. No yacen con los héroes caídos de antaño, aquellos que bajaron al seol con sus armas de guerra, a los que se les ha puesto la espada bajo su cabeza y los escudos sobre sus huesos, porque el pánico de los héroes cundía en la tierra de los vivos. Pero tú serás quebrantado en medio de incircuncisos y yacerás con las víctimas de la espada. Allí está Edom, sus reyes y todos sus príncipes, que fueron puestos, a pesar de su prepotencia, entre las víctimas de la espada. Yacen entre incircuncisos, con los que bajan a la fosa. Allí están todos los príncipes del norte, todos los sidonios, que bajaron con las víctimas, a pesar del pánico que sembraba su prepotencia. Confundidos, yacen, incircuncisos, entre las víctimas de la espada, y soportan su ignominia con los que bajan a la fosa. Faraón los verá y se consolará a la vista de toda esa multitud, víctima de la espada, Faraón y todo su ejército, oráculo del Señor Yahveh. Porque había sembrado el pánico en la tierra de los vivos, será tendido en medio de incircuncisos, con las víctimas de la espada: Faraón y toda su multitud, oráculo del Señor Yahveh.
Puede apreciarse en el texto anterior que estos hombres son descritos constantemente como "los caídos", "los héroes", "los héroes de antaño", caídos por la espada, exactamente con la misma palabra de Génesis, (Nefilim), misma que no es usada en ninguna parte de la Biblia, sino sólo en estos dos textos (Génesis 6,4 y Números 13,33).
PERO, ¿Y ENTONCES LOS GIGANTES?
La Biblia no miente, los gigantes existieron y continúan existiendo hasta el día de hoy. Los hombres pueden mentir, pero la Biblia no, y aunque abundan fotomontajes en internet con falsos esqueletos inmensos e irreales al puro estilo hollywoodense, los gigantes de que habla la Biblia sí son reales, tan reales como los que se pueden ver hoy, famosos muchos de ellos.
Como dijimos, los hombres pueden mentir y de hecho lo hacen, pero la Biblia no. Así pues, los exploradores enviados por Moisés, mintieron al asegurar que habían visto gigantes enormes en la tierra de Canaán:
Números 13:31-33
Pero los hombres que habían ido con él dijeron: «No podemos subir contra ese pueblo, porque es más fuerte que nosotros.» Y empezaron a hablar mal a los israelitas del país que habían explorado, diciendo: «El país que hemos recorrido y explorado es un país que devora a sus propios habitantes. Toda la gente que hemos visto allí es gente alta. Hemos visto también gigantes, hijos de Anaq, de la raza de los gigantes. Nosotros nos teníamos ante ellos como saltamontes, y eso mismo les parecíamos a ellos.»
Pero los hombres que habían ido con él dijeron: «No podemos subir contra ese pueblo, porque es más fuerte que nosotros.» Y empezaron a hablar mal a los israelitas del país que habían explorado, diciendo: «El país que hemos recorrido y explorado es un país que devora a sus propios habitantes. Toda la gente que hemos visto allí es gente alta. Hemos visto también gigantes, hijos de Anaq, de la raza de los gigantes. Nosotros nos teníamos ante ellos como saltamontes, y eso mismo les parecíamos a ellos.»
Y por esa mentira, Dios condenó a los mentirosos y a los que les creyeron a vagar 40 años en el desierto.
Los verdaderos gigantes que menciona la Biblia son los “Emitas”, los “Refaítas” o “Zanzumitas” y los más famosos, “Los hijos de Anaq”.
Deuteronomio 2:9-11
Yahveh me dijo: «No ataques a Moab, no le provoques al combate, pues yo no te daré nada de su país, ya que Ar se la he dado en posesión a los hijos de Lot. Antiguamente habitaban allí los emitas, pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas. Tanto a ellos como a los anaquitas se los tenía por refaítas, pero los moabitas los llamaban emitas.
Yahveh me dijo: «No ataques a Moab, no le provoques al combate, pues yo no te daré nada de su país, ya que Ar se la he dado en posesión a los hijos de Lot. Antiguamente habitaban allí los emitas, pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas. Tanto a ellos como a los anaquitas se los tenía por refaítas, pero los moabitas los llamaban emitas.
Deuteronomio 2:20-21
También éste era considerado país de refaítas; los refaítas habitaron aquí antiguamente; y los ammonitas los llamaban zanzumitas, pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas; Yahveh los exterminó ante los ammonitas, que los desalojaron y se establecieron en su lugar.
También éste era considerado país de refaítas; los refaítas habitaron aquí antiguamente; y los ammonitas los llamaban zanzumitas, pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas; Yahveh los exterminó ante los ammonitas, que los desalojaron y se establecieron en su lugar.
Las medidas de los gigantes de la Biblia, aunque enormes para el hombre ordinario, no son tan descomunales como describieron los mentirosos exploradores de Moisés, por ejemplo, Og, rey de basán, su cama medía 9 codos, igual a 4.05 metros de largo por 4 codos de ancho, es decir, un metro y ochenta centímetros, 1.80. ¡De modo que su estatura sería de casi 3 metros!
Deuteronomio 3:11
Og, rey de Basán, era el último superviviente de los refaítas: su lecho es el lecho de hierro que se halla en Rabbá de los ammonitas, de nueve codos de largo por cuatro de ancho, en codos corrientes.
Og, rey de Basán, era el último superviviente de los refaítas: su lecho es el lecho de hierro que se halla en Rabbá de los ammonitas, de nueve codos de largo por cuatro de ancho, en codos corrientes.
Goliat de Gat, el famoso gigante al que venció David, medía 6 codos y un palmo, es decir, 2.93 metros de estatura.
1 de Samuel 17:4
Salió de las filas de los filisteos un hombre de las tropas de choque, llamado Goliat, de Gat, de seis codos y un palmo de estatura.
Salió de las filas de los filisteos un hombre de las tropas de choque, llamado Goliat, de Gat, de seis codos y un palmo de estatura.
El no tan alto Michael Jordan, 2.01 mts.
de estatura, al lado del gigante chino
de 2.36 mts. Yao Ming.
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Los gigantes descritos en la biblia no tienen nada de fantasía ni de falsedad, si tomamos en cuenta que hoy en día, el gigantismo existe y puede ser visto todos los días, un ejemplo de ello es Robert Pershing Wadlow, que vivió de 1918 a 1940 y medía 2.72 metros de estatura. Ejemplos pueden ser vistos en televisión o por internet.
LA POSICIÓN OFICIAL DE LA IGLESIA CATÓLICA SOBRE LOS GIGANTES NEFILIM
No existe sobre este tema en particular una posición oficial por parte de la Iglesia Católica. Lo que sí existe son interpretaciones teológicas a las que la Iglesia se ha inclinado o favorecido según la época.
En los primeros siglos del cristianismo, la opinión de algunos Padres Apostólicos como Eusebio de Cesarea, Justino mártir, Clemente de Alejandría, Orígenes, Tertuliano, Ireneo de Lyon y Atenágoras de Atenas, identificaban a los "hijos del dios" con ángeles. Sin embargo, la creencia de que los ángeles tuvieron relaciones sexuales con mujeres es de origen judío, y no de origen cristiano. Algunos Padres Apostólicos, sin duda influenciados por el judaísmo, sostenían la misma opinión de aquellos.
En los primeros siglos del cristianismo, la opinión de algunos Padres Apostólicos como Eusebio de Cesarea, Justino mártir, Clemente de Alejandría, Orígenes, Tertuliano, Ireneo de Lyon y Atenágoras de Atenas, identificaban a los "hijos del dios" con ángeles. Sin embargo, la creencia de que los ángeles tuvieron relaciones sexuales con mujeres es de origen judío, y no de origen cristiano. Algunos Padres Apostólicos, sin duda influenciados por el judaísmo, sostenían la misma opinión de aquellos.
No existe sin embargo, un consenso general entre los Padres de la Iglesia. Los Padres apostólicos de época posterior a los antes citados como San Jerónimo, San Agustín, Julio el Africano, opinaban que los hijos de Dios de Génesis 6 no son ángeles, sino los hijos de Set. Opinión teológica, que sin ser nunca definida es la que actualmente sostiene la Iglesia Católica.
Sobre la expresión “hijos de Dios.” la mayor parte de los Padres se inclina por la opinión propuesta por Julio el Africano, según la cual los “hijos de Dios” serían los descendientes de Set, mientras que las “hijas de los hombres” serían las descendientes de Caín. Del comentario a la Biblia de los profesores de Salamanca.
Sexto Julio Africano (c. 160 - c. 240) condena la opinión de que los "hijos de Dios" eran ángeles.
San Agustín de Hipona, en su libro La ciudad de Dios, dio la interpretación que se sigue desde entonces en la Iglesia Católica, que enseña que la expresión "hijos del dios" en la Biblia debe utilizarse sólo para referirse a los descendientes de Set, llamados así por su amor a Dios. Julio Africano y Agustín para apoyarse citan a Mateo e interpretan una frase de Jesús que dice que "los Ángeles no se casan".
CONCLUSIÓN
LOS ÁNGELES CAÍDOS NUNCA TUVIERON HIJOS CON MUJERES HUMANAS
LOS CAÍDOS O NEFILIM, NO SON ÁNGELES CAÍDOS, SINO HÉROES ANTIGUOS CAÍDOS EN COMBATE, SEGÚN EL PROFETA EZEQUIEL
LOS GIGANTES SÍ EXISTIERON Y CONTINÚAN EXISTIENDO EN LA ACTUALIDAD
LA BIBLIA NO MIENTE, SON LOS HOMBRES QUIENES LA INTERPRETAN EQUIVOCADAMENTE
POR ESO, LA RESPUESTA NO DEBE BUSCARSE FUERA DE LA BIBLIA, SINO EN LA BIBLIA MISMA
PAX ET BONUM
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Exelente!!!!
ResponderBorrarHermano.
Un abrazo hermano, bendiciones
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ResponderBorrarPero la gran ramera no era el imperio romano?
ResponderBorrarMuy buena explicación pero ahora me surge otra pregunta ¿porque Jesús se decía el hijo del Hombre?
ResponderBorrarCreo que tenía que ver con la parte humana suministrada por María Santísima. Por favor me gustaría saber también la posición de la iglesia. Gracias.
BorrarJesús es el mencionado en el libro de Daniel cómo hijo hombre y en el nuevo testamento se dice hijo de hombre,de la dinastía de David
BorrarExcelente la explicación, voy aprendiendo, muchas gracias.
ResponderBorrar"Cuando la humanidad comenzó a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas" A ver si comprendo bien, la humanidad se multiplicó por la unión entre los hijos e hijas de Adán y Eva, a esos se les llamó hijos de Dios y a los nacidos entre los hijos de Caín y los otros hijos de Adán y Eva, se les llamó hijos de hombres? Gracias.
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
BorrarLos hijos de Adán y Eva y descendientes de Set fueron llamados hijos de Dios, y las descendientes de Caín, producto de su unión con una hija de Adán, fueron llamadas hijas de los hombres. Si, al menos así lo entendí de lo dicho en este post.
BorrarDonde dice la biblia que la gran ramera es jerusalen? He leido que era el imperio de roma
ResponderBorrarTodos los argumentos aquí descritos, están basados en una visión subjetiva (eiségesis) y esto provoca el surgimiento de más preguntas que respuestas.
ResponderBorrarbuenas noches. tengo una duda, si en ninguna parte de la biblia dice que Dios dotó a los ángeles de cuerpo, ¿como estos pudieron comer cuando Dios los envió con lot a sodoma?. Bendiciones
ResponderBorrarGracias; me ha clarificado la pregunta que se me presentaba en la oracion y la lectura. Buen trabajo
ResponderBorrarPero en la carta de Judas dice todo lo contrario...
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